Kumamoto y los chicos de Wikipolítica. Foto: Marissa Guerrero

Wikipolítica ya era un partido embrionario, con una identidad, con una marca (el arbolito) y con una filosofía que  Kumamoto y sus candidatos honraron:obtuvieron un millón de votos sin pactar con los poderosos, sin guerra sucia y sin derrochar dinero público.

Desde mi punto de vista, es la mejor decisión.

Aquí va mi comentario: